Imputan a Betiana Colhuan por actos de vandalismo contra el Centro Cívico de Bariloche. 

La machi (sanado) de Lafken Winkul Mapu en Villa Mascardi, fue imputada por actos vandalismo realizados en el Centro Cívico de Bariloche, denunciadas por la Municipalidad. Colhuan negó ser autora de las pintadas que se le imputan y afirmó que estaba en prisión domiciliaria en el momento de los hechos. 

El miércoles pasado, la fiscal Betiana Cendón acusó a Betiana Colhuan por los daños (pintadas con aerosol) hechos el 2 de junio, durante la marcha Ni una menos, en el acceso principal a la Municipalidad de Bariloche, edificio que es patrimonio histórico. 

El juez de garantías Sergio Pichetto admitió los cargos contra Colhuan formulados por la fiscalía y dispuso 4 meses para investigar el caso. La secretaria Legal y Técnica de la Municipalidad, Karina Chueri, adhirió a la imputación fiscal: el municipio es querellante en la causa.

Cendón sostuvo la formulación de los cargos contra Colhuan con las grabaciones de las cámaras de seguridad del centro de monitoreo, Si bien la autora de las pintadas estaba con el rostro cubierto, su vestimenta y anillos coincidiría con los de Colhuan en fotos publicadas. A partir de esas imágenes es que la imputan por vandalismo. 

La prisión domicialiaria era “laxa”

La fiscal aseguró que el secretario del juzgado federal Alejandro Iwanow le relató que no había un régimen de control sobre las mujeres mapuche con prisión domiciliaria hasta el 5 de junio por la usurpación en Mascardi. “No había pulsera electrónica, ni control policial”. 

Según Cendon, el secretario dijo que las mujeres solo debían presentarse semanalmente en el Gabinete de Criminalística de la Policía de Río Negro, que “rara vez se presentaban”, que “tenían autorizaciones para circular por la ciudad” y “que era una prisión domiciliaria muy laxa”.

Sobre la imputación por vandalismo, Colhuan negó tener la contextura física de la mujer que capturaron las cámaras. “Estaba detenida y no salí a la marcha”, dijo. Y preguntó por qué pondria en riesgo su inminente libertad (2 días después por participar de “una marcha cagada porque no soy feminista, soy mapuche”. 

Fuente: El Río Negro