Tras una orden de la Justicia Federal en Bariloche, Gendarmería desalojó el viernes un predio del Ejército ubicado en Lago Moreno que había sido usurpado por un hombre particular. “Las tierras usurpadas vuelven al Estado”, escribió el ministro de Defensa en X.
El operativo se llevó a cabo por orden del juez federal Gustavo Villanueva, luego de una investigación del fiscal Rafael Vehils Ruiz. Gendarmería desmanteló la toma y el lugar quedó resguardado por personal de la PSA, hasta que sea entregado nuevamente al Ejército por el juzgado.
La investigación llevada adelante por el Ministerio Público Fiscal de la Nación, tras las denuncias que hicieron el 30 de enero el Ejército Argentino y la comunidad mapuche Huala We de Bariloche, determinó que no se trató de una ocupación con fines habitacionales.
El trabajo de la fiscalía dejó a la luz que, detrás de la toma, habría un entramado empresarial consistente en la tala ilegal de especies arbóreas nativas, su procesamiento y comercialización en el domicilio de uno de los usurpadores, donde funcionaba una especie de aserradero.
Se secuestraron camiones repletos de troncos y leña, herramientas para tala y corte, documentación y equipos tecnológicos. Luis Petri, ministro de Defensa, felicitó el accionar de la fiscalía y de la Justicia e indicó que “quien las hace, las paga”, aunque no hay detenidos.
Según los vecinos del lugar, el protagonista de esta nueva usurpación es Moisés Gallego, el mismo hombre que en 2021 había usurpado terrenos aledaños.