“La Casa Rosada es patrimonio de todos y debe honrar a nuestros héroes de la patria”, leyó el vocero presidencial Manuel Adorni en el acto que oficializó el cambio de nombre del Salón de los Pueblos Originarios en la casa de gobierno, para homenajear a los veteranos de Malvinas. 

Una fuente en off de la Presidencia argumentó que cambiar el nombre “era lo que correspondía”, ya que “los de los pueblos originarios en el país “generan controversia”, a diferencia de la causa por la soberanía de las islas que “une sin diferencias a todos los argentinos”. 

Según datos oficiales, fueron movilizados para la guerra 23 mil combatientes. No hay información oficial sobre la cantidad de patagónicos. Fuentes privadas nombran a los 52 combatientes mapuche del Ejército Argentino, 5 de ellos murieron en combate y 2 después de la guerra. 

Soldado mapuche Simón Antieco, fallecido en acción de guerra en las Islas el 9/5/82. Joven humilde, de la comunidad de Costa de Lepá, Chubut, falleció junto a otros conscriptos durante un patrullaje, luego de refugiarse en una casona aparentemente abandonada donde se inició un incendio. 

El periodista veterano de Malvinas Edgardo Esteban recuerda a los veteranos mapuche. Murieron en las islas los soldados argentinos de origen mapuche Antieco, Oscar Millapí, Isaías Quilahueque, Patricio Guanca y José Curima, y luego de la guerra Agustín Caniullán y Juan Loncopan. 

Más allá del origen de cada combatiente, preocupa saber que el suicido es un flagelo grave entre los veteranos. Desde que terminó la guerra se suicidaron casi la misma cantidad de veteranos que murieron en las islas durante el conflicto bélico.